Nulidad de cláusula suelo
Nulidad de cláusula suelo
Las cláusulas suelo son una limitación que se establece en algunos préstamos hipotecarios, de tal forma que, aunque el interés Bajoeuro sea inferior, el banco cobrará un interés mínimo del préstamo que, en cualquier caso, será superior al porcentaje fijado en el contrato.
Nulidad de la cláusula suelo: ¿En qué consiste?
La nulidad de la cláusula suelo significa que esta cláusula será eliminada del contrato, y el banco no podrá seguir aplicándola sobre el préstamo hipotecario. Esta nulidad se puede solicitar judicialmente, aunque hay que tener en cuenta que, antes de presentar la demanda y en muchos casos, es posible alcanzar un acuerdo con el banco que evite un proceso judicial.
¿Qué requisitos hay que cumplir para que una cláusula suelo se considere nula?
La cláusula suelo debe ser clara y fácilmente comprensible. Si una cláusula es complicada de entender, puede ser motivo de nulidad. Además, no se pueden establecer condiciones abusivas para el consumidor, y esta cláusula no puede perjudicar gravemente las condiciones del contrato hipotecario.
¿Qué hacer si se desea reclamar la nulidad de una cláusula suelo?
En primer lugar, es necesario comprobar si se tiene o no una cláusula suelo en el contrato de préstamo hipotecario. Si se tiene, es importante acudir a un abogado especializado en derecho bancario que pueda estudiar el contrato y aconsejar sobre la mejor estrategia a seguir.
¿Qué consecuencias tiene la nulidad de una cláusula suelo?
La nulidad de la cláusula suelo supone que el banco no podrá seguir aplicándola al préstamo hipotecario. Por tanto, los intereses a pagar sobre el préstamo hipotecario se ajustarán al euríbor, sin que haya un interés mínimo a pagar. Además, si el usuario ha estado pagando intereses como consecuencia de esta cláusula, es posible solicitar la devolución de dichos intereses de manera retroactiva.
¿Cómo se puede reclamar la devolución de los intereses pagados con la cláusula suelo?
Una vez declarada la nulidad de la cláusula suelo, se puede solicitar la devolución de los intereses que se hayan pagado como consecuencia de esta cláusula. El banco deberá devolver estos intereses de manera retroactiva, es decir, desde el inicio del contrato hipotecario.
Conclusión
La nulidad de la cláusula suelo es posible, siempre y cuando se cumplan ciertos requisitos. Es importante contar con la asesoría de un abogado especializado en derecho bancario que pueda guiar al usuario en el proceso de reclamación. Además, la declaración de nulidad de la cláusula suelo supone una reducción en la cantidad de intereses a pagar sobre el préstamo hipotecario y, en muchos casos, la devolución de los intereses pagados como consecuencia de dicha cláusula.
